En unas declaraciones emitidas ayer a la agencia iraní de noticias Fars News, el general del ejército irakí Jabar Ali al-Mashkuri dijo que Estados Unidos colabora con los terroristas del Califato Islámico en la defensa de Tikrit, asediada desde hace semanas. El alto oficial irakí denunció, además, que algunos bombardeos de la coalición internacional no se llevan a cabo contra las posiciones de los terroristas sino del ejército irakí y de las milicias que colaboran con él en la lucha contra el Califato Islámico.
Las fuerzas estadounidenses que permanecen en Irak han ayudado a algunas unidades fundamentalistas a huir del teatro de operaciones y tratan de “confiscar” la victoria a las fuerzas de seguridad irakíes para atribuírsela ellos, dijo el general.
“Las fuerzas populares y del ejército han capturado un 80 por ciento de la ciudad de Tikrit bajo control del Califato Islámico, mientras que la presencia de Estados Unidos y de las fuerzas de la coalición [internacional] en las operaciones de Tikrit está destinada a confiscar esta victoria”, manifestó.
El general dijo que Estados Unidos impidió a las fuerzas del gobierno de Bagdad tomar parte en las operaciones de Tikrit para ayudar a los terroristas a escapar de la ciudad.
“Los aviones de guerra de Estados Unidos han bombardeado las posiciones de las fuerzas populares de Irak en la línea del frente al sur de Tikrit, matando al menos a cinco miembros de las fuerzas populares e hiriendo a varias decenas más”, lo cual demuestra la “voluntad estadounidense de injerencia en las operaciones de Tikrit”, añadió el general.
El oficial se refería a un bombardeo ocurrido en la madrugada del domingo, cuando los aviones estadounidenses volvieron a atacar las posiciones de las fuerzas populares de Irak mientras sostenían combates con los fundamentalistas cerca de Tikrit. Se produjeron un total de ocho bombardeos que ocasionaron varios heridos entre las unidades de combatientes, mientras que el Califato Islámico salió indemne.
No es la primera vez que las fuerzas aéreas de Estados Unidos bombardean al ejército irakí para socorrer al Califato Islámico en distintas posiciones del frente.
Desde hace un mes casi 30.000 combatientes del ejército de Irak y de las milicias sunitas y chiítas tienen cercados a los fundamentalistas en Tikrit. Su caída pondría al Califato Islámico en una situación insostenible en la provincia de Salahuddin y todo el norte de Irak.
